Jorge Sampaoli dice que a Argentina "solo le sirve ganar" ante Venezuela
El cuadro albiceleste necesita los tres puntos para seguir soñando con el Mundial.
El seleccionador de fútbol argentino, Jorge Sampaoli, aseguró hoy que en el partido de este martes ante Venezuela, trascendental para la clasificación para el Mundial de Rusia de 2018, "solo sirve ganar".
"El partido va a ser muy traumático, porque el error se castigará", declaró Sampaoli sobre el encuentro ante los venezolanos, que se jugará en Buenos Aires.
En la rueda de prensa previa al duelo, el entrenador explicó que su planteamiento es "abrir el partido rápido" con un gol, de modo que el rival "salga del libreto seguramente defensivo".
Aunque apostó a que Venezuela desplegará un juego defensivo, dijo que el "deber" del combinado albiceleste es "modificar" esa estrategia.
Lo que más preocupa a Sampaoli son las posibles pérdidas de sus jugadores y los contragolpes del contrario, ya que opinó que Venezuela es un equipo "extremadamente de transición", con contraataques "muy rápidos y muy bien intencionados".
Sobre la falta de goles de Argentina, declaró que "es donde hay que trabajar" y que "no tiene relación con la capacidad" de los jugadores.
Como explicación al poco acierto goleador, apuntó a que "hay futbolistas que juntos se potencian y otros que juntos se neutralizan".
"Tenemos que seguir trabajando con la compatibilidad de algunos jugadores", admitió Sampaoli, que no confirmó el once titular para el partido de mañana.
No obstante, no puso en duda la importancia de Ángel Di María, "fundamental" según el seleccionador, que ensalzó la "profundidad" que da al equipo el jugador del Paris Saint-Germain.
Acerca del rendimiento de Dybala, reconoció que "la inserción de futbolistas nuevos se torna un poco más tardía", pero se mostró "muy esperanzado" con el futuro del delantero.
La albiceleste marcha quinta en la clasificación con 23 puntos y está en zona de repesca, por lo que necesita una victoria en casa luego del empate sin goles del jueves último ante Uruguay en Montevideo.
EFE